Grave situación campesinos en
Cajibío - Colombia
 
 

Bogotá, Noviembre 29 de 2000

Doctor  ANDRES PASTRANA ARANGO
Presidente de la República
Ciudad
 

Las organizaciones integrantes del CONSEJO NACIONAL CAMPESINO PARA LA ACCION RURAL –CNC– repudiamos la barbarie que grupos paramilitares están cometiendo contra las comunidades campesinas del municipio de Cajibío, Departamento del Cauca, y en el corregimiento de Nueva Venecia y otras poblaciones lacustres de la Ciénga Grande de Santa Marta en el departamento del Magdalena, en hechos que seguramente han sido de su conocimiento.

Los sucesos en Cajibío ocurrieron entre los días 19 y 24 de Noviembre del presente año –y siguen ocurriendo- en varios corregimientos del citado municipio y han consistido en maltratos, mutilaciones (como el corte total de cabello) y humillación a la población, secuestros y asesinatos selectivos, lista en mano. Entre las siete personas cobardemente asesinadas se cuentan tres comerciantes y cuatro humildes campesinos, entre ellos DIEGO ARNULFO CAMAYO, reconocido dirigente agrario y concejal electo en representación del movimiento campesino y popular de la región.
 

A su vez, en el departamento del Magadalena la barbarie de estos grupos ha dejado en la presente semana la fatídica cifra de más de 70 muertos y cerca de cien desaparecidos, lo que constituye una de las acciones más violentas en la Costa Norte, donde tales grupos se mueven a su antojo, dejando a su paso muerte y desolación entre la población civil inerme.

 Estos horrendos sucesos han provocado a su vez el desplazamiento de miles de pobladores que huyen del terror paramilitar para salvar sus vidas, abandonando sus parcelas y pertenencias, condenados al oprobioso desarraigo que han sufrido tantos compatriotas en ya muchos lugares del país.
 

Rechazamos firmemente estos actos de violencia contra las comunidades campesinas, de pescadores y sus dirigentes en el Cauca y el Magdalena, al tiempo que responsabilizamos a su gobierno de estos hechos que deben cesar. Exigimos a su gobierno la protección efectiva de estas comunidades inermes así como la persecución y castigo a los grupos criminales que los aterroriza y asesina, y también a sus auspiciadores, que son sin duda los enemigos de la lucha por la tierra, la reforma agraria y la paz con justicia social en los campos de Colombia.

 Exigimos la inmediata atención humanitaria para la población desplazada por los hechos de violencia referidos, suministrándoles los medios de alojamiento, alimentación y salud dignos de su trágica situación, mientras se les garantiza su retorno en condiciones de seguridad.

 Atentamente,

CONSEJO NACIONAL CAMPESINO PARA LA ACCIÓN RURAL –CNC–
consejocampesino@uol.com.co